Personas diferentes … ¿Características similares?
Tras un tira y afloja entre una madre y su hijo de 6 años de Altas Capacidades, la madre finalmente le dice:
Creo que no lo has entendido, Ponyo.
El niño Ponyo (el nombre no es el real) le contesta:
He dicho que creía haberlo entendido, no que lo hubiese entendido.
Ese maravilloso razonamiento no es el habitual a los seis años. Este es uno de los rasgos de las personas de Altas Capacidades, la capacidad de raciocinio desde bien pequeñ@s.
Personas diferentes, ¿Características similares?
Existe la costumbre de querer listar una serie de características sobre las cosas en general. Generalizar, uniformar, poner a todos en el mismo saco…. ¿Por qué la sociedad de hoy día lo necesita tanto? ¿Existe aún un cierto “miedo” a la diferencia, a la diversidad? Lo podemos decir sobre las Altas Capacidades, pero también sobre otros ámbitos. Por poner algún ejemplo, pasa con las discapacidades, o lo podríamos ver también sobre los refugiados, o sobre el movimiento LGBTI. Parece que ese rechazo social a lo que es diferente sigue aumentando últimamente, simplemente cabe escuchar las noticias de actualidad que cada día se inmiscuyen en nuestros hogares.
Cuando nos imaginábamos que este rechazo a la diferencia, a lo que no es común lo teníamos superado, aparece con más ímpetu. ¿Cómo lo veis?
Sobre las características en las Altas Capacidades …..
Si nos limitásemos a hacer un simple listado de Características para las Altas Capacidades, podría llevarnos a los típicos Mitos, Tópicos, Prejuicios y Estereotipos que tanto abundan y de los que otro día hablaré.
Las personas de Altas Capacidades, está comprobado en los últimos estudios de investigación, tienen un cerebro diferente, una manera diferente de hacer las cosas. Captan, capturan y procesan los imputs, las informaciones de forma diferente al resto; guardan, interrelacionan y recuperan estas informaciones de forma diferente; y las aplican y expresan de forma diferente. Como en la conversación del inicio, su capacidad de razonamiento es elevado. Siempre insisto en que cada persona es diferente…. ahora bien sí es cierto que hay una serie de aspectos que muchas veces -¡otras no!- coinciden. Por lo general, acostumbran a darse algunos de estos aspectos antes de lo que por edad correspondería. Algunos de ellos -entre muchos otros- podrían ser:
- Capacidad de razonamiento elevado, para asimilar algunos conceptos, para relacionar cosas, aprendizajes, momentos, situaciones, …. Cuidado, porque estos niños acostumbran a “pillar” incongruencias en los adultos 😉
- Muchos tienen una gran capacidad de memorizar, otros no tanto.
- Habitualmente existe una gran memoria de cuando eran pequeños, muy pequeños. Situaciones concretas, lugares, …. Casos como el niño que con siete años volvió de vacaciones a un lugar que había estado la familia cuando tenía menos de un año y recordaba perfectamente el lugar y lo que habían hecho. Incluso a veces rememoran, recuerdan músicas, canciones, …. que la mamá les cantaba cuando estaban en su barriga. ¡El gran poder de la música!
- Desde muy pequeños acostumbran a ser precoces en los aprendizajes. Algunos, leen antes de lo habitual y solos -otros no-; su vocabulario suele ser muy rico, extenso, peculiar a veces… Llama la atención las expresiones que utilizan. Palabras que nadie les ha enseñado. Como la niña de un año que construía una frase entera con sentido. O el niño que a los cuatro años aprendió solo a leer a partir de los rótulos de la calle.
- Pero a veces nos encontramos con niñ@s que parece que les “cueste” los aprendizajes, y que incluso muestren dificultades en algunos aprendizajes.
- El placer por saber, por aprender, es algo que casi tod@s manifiestan.
- Aprender muchas cosas y cosas variadas, pero no cualquier cosa… Además, aprender en profundidad, no de cualquier manera, no de forma superficial. Son los alumn@s que necesitan en las aulas que el enseñante les ofrezca y permita la posibilidad de realizar aprendizajes significativos.
- Su gran curiosidad. Por ejemplo, a algunos les cuesta la lectura, pero cuando se enganchan -porque eso es lo que la mayoría necesita, engancharse a los aprendizajes, conectar con el maestro/profesor y volar-, no paran, son los y las típicos “ratas” de biblioteca, mostrando un gran ansia para leer más y más…
- Esa inquietud -que no es TDH, ¡cuidado!, pero es que ¿qué niñ@ no es movido, y si no se mueve ¡ahí sí hay un problema!- por experimentar, DESCUBRIR, tocar, saber, preguntar, moverse, probar…..
- Preguntas, pregunta mucho, sí. Desde muy pequeños. El ¿Por qué? es una constante. Y ¡ojo! No solo el ¿Qué? sino el ¿Por qué? sí, pueden resultar agotadores para algunas familias, pero es impresionante hasta dónde pueden llegar…..
- Y las preguntas suelen ser muy reflexivas, trascendentales.
- Tendencia a estar con adultos, personas mayores, y/o niños o jóvenes de mayor edad.
- Al mismo tiempo, cierta tendencia a necesitar momentos de “soledad”, para jugar solos, o para estar a solas consigo mismos. Es un magnífico proceso que permite la reflexión y la autoreflexión, que de eso saben un rato largo, así como de perfeccionismo y de autoexigencia.
- Creatividad e imaginación suele estar presente antes o después durante su ciclo vital, solo hay que dejarles serlo. Luego se trata de trabajarla, pues la creatividad -en contra de lo que algunos creen- no es un don divino y si uno nace así, no tiene nada más que hacer, no. El esfuerzo, perseverancia, frustración también, suele ir unido a la creatividad. Y cuando hablamos de Creatividad y Altas Capacidades suele darse en diferentes ámbitos, de eso también hablaré otro día. Es el niño que te crea un maravilloso escenario de cuento con todo de detalles (mediante la expresión verbal o el dibujo por ejemplo); o la niña que cuando te cuenta algo da vueltas, pone contexto, detalles, símiles, pero tiene muy claro lo que quiere decirte; o el adolescente que te toca una melodía de oído en el piano o en la guitarra; o el niño que tiene maravillosas habilidades para la danza. Pero eso no quiere decir que si luego quiere dedicarse deba practicar, insistir, perseverar.
- ¿Maduros? Sí, suelen serlo en algunos aspectos. Lo que sí es cierto es que no se les puede dar gato por liebre.
- Sensibles, también.
- Inconformistas …. sí
- Y desafiantes, muchas veces. Pero no por molestar. Es el niño que va preguntando sobre el mismo tema a su profe pero las preguntas cada vez son más complejas. Y no, no lo hace para fastidiar, sino porque necesita saber más. Le gusta jugar con los aprendizajes, con las materias, necesita saber y entender. También desafían a otros a veces cuando ven que se les quiere tomar el pelo o cuando algo no es lo debiera ser, entonces se “rebotan” con toda la razón y pueden llegar a ser “punzantes”. Hay que entender que: ¡¡¡¡¡NECESITAN RETOS!!!!!
- Tendencia al aburrimiento cuando no tienes metas ni retos …. Si no se les da actividades atractivas, se desmotivan con facilidad …Necesitan, insisto, hacer, probar, ver, diferentes cosas. Si el sistema educativo se basa en repeticiones y repeticiones, ¡no es de extrañar que se aburran! Si el P4 ya saben leer o ya saben multiplicar, ¿qué van a hacer si no se les plantea actividades a sus necesidades?
- Cuestionan mucho las cosas (y a los otros), tanto niños como adultos. Dan vueltas para mejorar, las ideas se mueven por la mente a gran velocidad. Es necesario que desconecten, por eso funciona muy bien la meditación.
- Cierto sentido del humor “quedón”, a veces algo “cínico” ¿?
- La justicia, en el sentido de la justicia son impecables.
- Suelen ser directos en cuanto a algunas cuestiones, esa “lengua afilada” les puede traer problemas.
- Dormir poco, bastantes, aunque no todos. Estar activos y activos. Es que si se duerme uno se pierde muchas cosas…
- Algunas “manías“: etiquetas que pican y no se pueden poner aquél jersey (se quitan y ya está), con la comida, con que les toquen (los besos de la abuela no siempre son bien recibidos), pueden comportarse de forma arisca, pero con quienes se sienten a gusto y bien tratados suelen ser todo lo contrario.
Hasta aquí algunas “características”, que -insisto- NO son aplicables a TOD@S. Lo que sí es aplicable a todos es la necesidad de contar con un entorno estimulante, y unos aprendizajes adecuados a sus necesidades, porque tienen necesidades específicas y si no se les ofrece un ambiente estimulante, favorable, será más difícil que puedan desarrollar sus capacidades. La intervención debe tener con el objetivo no solamente ofrecer recursos y potenciar sus capacidades, sino que debe ir más allá, y promover que no se encuentren con limitaciones tanto a nivel de contenidos como a nivel de ideas preconcebidas por parte de los adultos que los atienden. Si no es así, no tendrán las mismas oportunidades que el resto.
Ahora bien, como cualquier niño precisan los límites, precisamente para desarrollarse sanamente. Pero no los límites para no permitirles el aprender y descubrir, sino los límites que les ayuda a situarse, a saber dónde está la línea que no hay que cruzar, esos límites a muchas familias les supone a veces grandes esfuerzos, que hacen estar y sentirse incómodos (la TV se mira un rato por la tarde -el que sea-, el ipad o el ordenador o….. durante tanto tiempo al día, hoy toca hacer esto, uno se ducha cada día -esto en algunos adolescentes es muy típico-, recoger los juguetes antes de irse, etc.etc.), pero que son tan y tan necesarios, para su adecuado desarrollo y que de mayores tanto agradecen.
¿Quién se anima a seguir aportando más “características”?
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